El novillero mexicano acababa de finalizar labores de tienta en el momento de comentar su inclusión en la feria de San Isidro, durante una novillada que supone su cuarto paseíllo en la plaza de Las Ventas de Madrid, donde toreó el domingo pasado y estuvo bien aunque sin poder cosechar un triunfo.

Mario llegó a España el pasado 5 de febrero y desde entonces ha asumido su carrera con gran profesinalidad, pues es consciente de qu este año será el de su lanzamiento definitivo de cara a una alternativa con importancia, que le permita posicinarse rápidamente entre las filas de los matadores.

-¿Qué sientes al ver tu nombre en un cartel de San Isidro?

-Una gran emoción porque es algo que estaba buscando desde hace tiempo, y tuvieron que pasar cuatro novilladas para ver este sueño convertido en realidad.

-¿Te agrada la novillada de La Quinta?

-Por supuesto que sí, aunque también me hubiese agradado matar la novillada de Guadaira. Sin embargo, creo que este encaste le gusta al público de Las Ventas y valora mucho más lo que se haga con estos novillos, pues el encaste de Santa Coloma tiene sus seguidores.

-¿Qué opinas de tus compañeros de cartel?

-Son profesionales y se habla bien de ellos, aunque la verdad yo voy a lo mío y nunca me ha interesado con quién me pongan.

-¿Cuál será la estrategia de preparación para este festejo?

-Mi maestro, Juan Cubero, quiere que haga varios tentaderos y mate algunos toros a puerta cerrada, precisamente en ganaderías que tengan este encaste. De hecho, vengo saliendo de la ganadería de Carlos Cancela que está formada con Santa Coloma. Por lo demás, entrenaré muy bien la parte física y torearé de salón con la misma intensidad.

-Además de esta fecha y la de Zaragoza, ¿tienes alguna otra novillada en puerta?

-De momento, no. Algo me ha comentado que vamos a torear en Alicante, pero yo no estoy al tanto de esas cosas, pues para eso está mi apoderado. Yo sólo estoy para torar donde él me diga y en el momento que me diga. Mi mentalización está al día y me siento preparado para los compromisos fuertes.