Apreciable matador Perera:
Con mis saludos y deseos de que tu recuperación de esa complicada y grave cornada del 3 de octubre pasado en la plaza Monumental de Madrid esté lograda, paso a describirte cómo he seguido tu increíble temporada del 2008.
En mis 74 años de aficionado, pocas veces he visto un desempeño tan triunfal en una temporada como el tuyo. Desde ese arranque en Torremolinos en febrero, Castellón y Olivenza en marzo, las dos orejas a los de El Ventorrillo en Sevilla, y después tus dos tardes cumbre en Nimes, para culminar en Madrid con esas dos orejas al toro de Núñez del Cuvillo. Así cerraste esa primera mitad del año con triunfos en las plazas de León y Soria.
Y en los primeros días de mayo viniste a nuestra gloriosa feria de "San Marcos" de Aguascalientes a realizar la mejor faena del ciclo, para continuar con tu paso impresionante por ruedos de España y Francia.
Lograste los mejores triunfos al lado de El Juli, Enrique Ponce y otros figurones; cuatro orejas en Cuenca al lado de José Tomás. Oreja escatimada en Pamplona y bronca al juez.
Las dos orejas en Bilbao y otras en Barcelona, y al final la épica encerrona de Madrid.
Afirman buenos aficionados y acuciosas críticos que esa encerrona no era necesaria y que tus objetivos para 2008 estaban logrados y superados, pero como los tuyos -que apuntan a lo más alto- estaban por encima de opiniones sabias, quisiste, como lo enuncia la revista 6 Toros 6, ir “de Madrid al cielo” y ahí estás situado como un nuevo mandón en la Fiesta.
Herido continuaste la gesta heróica para matar ese quinto toro que te corneó tan gravemente, pero que te catapultó hacia la estratosfera con el testimonio de los más “duros” madrileños quienes coreaban al unísono: “¡Torero, torero!” cuando ibas por tu propio pie a la enfermería con la oreja, mientras el toro rodaba muerto.
Ahora se avecina la confirmación mexicana de tu alternativa, por lo que creo necesario hacerte unas respetuosas sugerencias y narrarte algunos antecedentes:
El año pasado, José Tomás, ya dueño de una expectación fuera de serie y tras su triunfo sonoro en la México, se presentó en Guadalajara, Jalisco, para matar una vergonzosa novillada, pero como los utreros suelen también pegar cornadas, él se llevó una; mientras por su pie se dirigía a la enfermería el público coreaba “¡ratero, ratero!”, y no era para menos. Mucha gente que viajó desde distintas localidades vecinas, y otras no tan cercanas, se sintió defraudada.
Un equivocado y servil taurino mexicano convenció al apoderado del de Galapagar de que había que apañarlo con un encierro chico y “aliviarlo”, creyendo que el torero actuaba en un pueblo como San Tecacalango de los Monos. Quiso soslayar la gloriosa historia de la plaza de Guadalajara y se equivocó rotundamente.
Ahora ha dicho José Tomás que está sentidísimo con el público tapatío, y que no piensa volver a torear ante el público que lo hostilizó.
En octubre pasado, en Pachuca, Hidalgo, un seudo empresario se cargó la alternativa de Octavio García "El Payo" y pretendiendo dar un campanazo de polendas, presentó otra novillada al lado nada menos que de Morante de la Puebla, quien fungía como padrino de alternativa, alternando con Sebastián Castella e Ignacio Garibay. El resultado ya se venía venir por lo que la entrada registró menos de tres mil personas, cuando el aforo del coso asciende a nueve mil.
Hace dos años los sobreprotectores de Pedro Gutiérrez Lorenzo “El Capea” también tuvieron a bien cargarse la confirmación de Perico en la México, y el público presente se puso de pie, pero de espaldas al ruedo en protesta por la burla de haber presentado en la México novillos por toros.
Semejantes petardos en la presentación de Paco Ojeda y de El Cordobés, solo que éste lejos de sentirse afectado, saco la casta y demostró a tirios y troyanos porque era el el único mandón de esa época.
Miguel Ángel: en el 2008 has matado 168 toros, o mejor dicho 172, pues los cuatro de Aguascalientes también lo fueron. Si estás acostumbrado a matar toros y tu apoderado, Fernando Cepeda, torero de una trayectoria ejemplar, y ahora un profesional del apoderamiento, están conscientes de estos tristes acontecimientos que he traído a la memoria, no permitas que ningún servil equivocado meta mano como “veedor de toros”, y que cuantos mates en plazas de México lo sean en verdad.
Estás llamado a ser un legatario de la idolatría que tuvieron ante nuestra afición Manolete, Paco Camino, El Niño de la Capea, Enrique Ponce, Jose Tomas y otro mejor.
Bajo los objetivos que te has trazado y sin manchas, de las que suelen ocurrir en mi país, tienes el camino abierto en México, en Extremadura, en Madrid y en cualquier parte del mundo.
Te deseo la mejor suerte en tu incursión por las plazas mexicanas, y que refrendes pronto tu triunfo de Aguascalientes.
Carlos Pavón