Miguel Aguilar ha vuelto a ser y, sobre todo, sentirse "el de antes" con el triunfo que obtuvo en la plaza "San Marcos", de Aguascalientes, el pasado domingo 31 de agosto, en la segunda corrida de la Vendimia, lo volvió a la vida literalmente, el cual le cayó como una verdadera bocanada de oxigeno.

Y es que desde aquella corrida que tuvo en la Plaza México en noviembre del año pasado, Aguilar no se había vuelto a vestir el traje de luces, simplemente porque las oportunidades dejaron de existir. Pero fue gracias a la faena que le arrancó al toro "Brujo", de Rosas Viejas, primer reserva de la tarde, que el toreo volvió a surgir como magia de la muleta del torero hidrocálido.

"Gracias a Dios fue una tarde muy buena y fue un regreso bastante gratificante porque me hacía falta sentir el triunfo, sentirme torero en la plaza y gracias a Dios pudo ser así".

A tres años y siete meses de que tomó la alternativa en la Plaza México, el 5 de febrero del 2022, Miguel Aguilar ha sumado apenas 32 corridas de toros en las que ha cortado 27 orejas. Su mejor año ha sido el de su alternativa cuando realizó el paseíllo en 18 tardes, luego del importante triunfo el día de su doctorado, en que le cortó dos orejas a un toro de Begoña en presencia de Julián López "El Juli", su padrino.

Posteriormente, en 2023 sumó nueve festejos y en 2024 la actividad se redujo a tan solo cuatro corridas, lo que llegó a causar extrañeza entre la afición el porqué de su ausencia.

"Pasa que todos los toreros pasamos por algún bache. La verdad que tuve mi primera etapa como matador de toros después de la alternativa muy buena, fui a plaza como las de Guadalajara, Aguascalientes y la México, pero luego al final esos aires buenos siempre se van agotando, más si uno comete errores. Al final pasó eso, que dejé de torear bastante. Ahorita  estoy sin apoderado, pero ya hay algunas pláticas interesantes que pronto daremos noticias, pero sin duda alguna lo de Aguascalientes me vuelve a poner en combate".

Afortunadamente en los corrales de la plaza estaba "Brujo", el toro que vino a ponerlo nuevamente en sintonía. Por la mañana ese toro estaba como segundo reserva, pero por laguna situación fue cambiado para lidiarse como primero, por si fuera necesario.

"Fue una casualidad de la vida que el segundo de mi lote se partió el pitón en el toril y entró el toro "Brujo" y fue buena sorpresa la que tenía la vida para mí, fue un gran toro que pude disfrutarlo mucho. Pude transmitirle a la gente mi toreo y eso sin duda alguna quedó en la memoria de la gente. Fue una faena emotiva, con emoción y hacía tiempo que yo no sentía los olés de Aguascalientes, del aficionado, tan gratificantes para mí que era yo el que estaba adelante".

Además, cabe hacer mención, que en junio pasado Miguel se convirtió en padre de una bebita que lleva por nombre Nina Aguilar Vargas, lo que confirma que todo recién nacido "trae torta bajo el brazo".

"Gracias a Dios, la vida me ha sonreído y soy papá. Nació en junio de este año y ahora tengo alguien por quien luchar y ser feliz. Se ve la vida diferente e influye bastante y al final llega por algo y te centra en lo que te tienes qué centrar".

El hidrocálido afirmó que sigue entrenando todos los días y en tanto logra tener el apoyo de alguien que le administre su carrera como apoderado, no dejará de buscarse sus tientas o corridas donde puedan surgir.

"Yo estoy a pie de lucha. Estoy entrenando todos los días, no estoy dejando por la borda nada, al contrario. Está en mis manos mi preparación, que eso no lo puedo dejar de aquí a que sea tangible alguna fecha. Sé que tengo que estar a pie de lucha y agradecer a la gente que siempre me guarda un cariño y me recuerda con buena intención", finalizó.