Arturo Macías no puede ocultar su gran satisfacción de haber comenzado con un triunfo su temporada en España, y tal vez más que eso, el impacto tan significativo que ha tenido entre los profesionales su primera incursión en esa guerra de las ferias de categoría.

Aunque aún no sabe cuando dejará el Hospital Casa de Salud de Valencia donde fue operado anoche, se le escucha contento, alegre, como es habitual en su carácter, y motivado por seguir adelante con la misma mentalización: la de cara o cruz que ayer quedó de manifiesto.

-¿Cómo pasaste la noche?

-Tuve dolor y náuseas, producto de los efectos de la anestesia, y casi no pude dormir porque cuando pasas emociones tan fuertes tu cabeza sigue dando vueltas, pero estoy muy orgulloso de haber triunfado aquí en Valencia, sin importarme nada la cornada que me pegaron.

-¿Y qué te pasó en la oreja?

-Me ha dolido mucho, también. El toro me rajó el cartílago de un palotazo. Digamos que cambié mi oreja por la del toro (risas).

-¿Qué valoriación harías de tu actuación?

-Creo que fue una actuación sólida en la que demostré que soy capaz de sobreponerme a los toros cuando no salen como uno espera. Ayer tuve mala suerte en el sorteo pero en ningún momento eso influyo en mi ánimo y busqué, por todos los medios, salir con el triunfo.

-Sabías que con el quinto no había vuelta atrás; es decir, era una última opotunidad en la corrida de cosechar un triunfo...

-Así es, por eso me fui a los medios a recibirlo de rodillas aunque no era un toro para comenzar así la faena. Esta actitud es la que aquí se valora, y en cualquier plaza, porque se deja en claro que uno no viene a especular, sino a entregarse de principio a fin.

-¿Qué pasó por tu mente cuando te perfilaste para matar?

-Mi único pensamiento era que debía reventar al toro y así conseguir la oreja, y me fui derechito tras de la espada. Fue una pena que me trajera con la mano el estoque, porque había colocado una gran estocada. Al final el toro se echó porque estaba herido de muerte y la gente pidió la oreja con fuerza y me la entregaron.

-Como siempre, apostando fuerte...

-La vida está hecha para los hombres valientes.

-¿Cuándo saldrás del hospital?

-Un doctor me dice que mañana y otro que en cinco días. Ojalá se pongan de acuerdo pronto, pero casi seguro que mañana o pasado, tampoco merece mucho la pena estar aquí metido. Quiero irme a mi casa de Alcorncosa a descansar y retomar los más pronto posible mis entrenamientos.

-Estará motivado Antonio Corbacho...

-Sí, mucho. Su teléfono no ha dejado de sonar. Han llamado muchos amigos para dar la enhorabuena. Desde ganaderos, toreros y periodistas... y también empresarios. Me parece que este primer golpe que he dado ha sido una llamada de atención que servirá para calentar mi temporada en Europa.

La próxima actuación de Arturo Macías está programada para el martes 13 de marzo en la Maestranza de Sevilla, donde actuará al lado de Serafín Marín e Ivan Fandiño, con lo toros de la ganadería portuguesa de Palha.

Macías corta una oreja con valor y sangre (crónica, fotos y video)