Hace apenas unos minutos, el matador Uriel Moreno “El Zapata” tuvo que ser nuevamente intervenido debido a una hemorragia que no se le detenía, de la grande y fuerte cornada penetrante de abdomen que sufrió anoche en la Plaza “El Relicario”, de Puebla.
Cuando el matador se encontraba de buen ánimo después de recibir la visita de su cuadrilla y amigos, y se reponía en planta del Hospital Ángeles de la Ciudad de Puebla, los médicos que lo atienden se dieron cuenta que la sanguaza normal de la herida se convirtió en una hemorragia.
Por ello determinaron ingresarlo nuevamente al quirófano y controlar la hemorragia, además de revisar precisamente el lugar y motivos de la misma.